jueves, 13 de mayo de 2010

Cierre de dispensarios de marihuana medicinal en Los Angeles

Para entender como funciona el espíritu del prohibicionista no encuentro ejemplo más amargo que la actual legislación sobre la prohibición de fumar tabaco en los corredores de la muerte de los centros penitenciarios de los Estados Unidos. Si partimos de esta cruel premisa podemos llegar a comprender el inminente cierre de 550 dispensarios de marihuana medicinal en la ciudad de Los Angeles. El Ayuntamiento de esta ciudad, en enero, aprobó una ordenanza para restringir la proliferación de dispensarios de marihuana para uso médico, una decisión que supondrá el cierre de cientos de establecimientos. Con la medida se prevé que la cifra de dispensarios de cannabis se reduzca a unos 150 en toda la ciudad.


La ordenanza, que comenzó a discutirse hace más de cuatro años, recibió el visto bueno del consejo municipal con la mayoría de los votos y ante las protestas de los defensores de los puntos de venta de cannabis, algo que es legal en California desde 1996 siempre que la droga se comercialice bajo receta médica. A partir de junio seguirán funcionando aquellos dispensarios que se sitúen a más de 300 metros de escuelas, parques o bibliotecas; impongan su cierre a las 20.00 hora local y prohíban el uso de la marihuana en los establecimientos. Quienes contravengan la medida se enfrentan a penas de hasta seis meses en la cárcel y multas de hasta 1.000 dólares, explicaron las autoridades locales en cartas dirigidas a estos negocios durante la última semana, publica hoy la prensa local.

Los dispensarios que sigan abiertos, no obstante, deben cumplir con una serie de estrictas regulaciones que incluye la revisión por parte de las autoridades del historial del propietario y el análisis del cannabis en laboratorios independientes. Los dispensarios tienen seis meses para cumplir los requisitos y deberán pagar algo más de 1.000 dólares de tasas para permanecer abiertos. Los lugares que permanezcan abiertos sin cumplir con esas premisas, pasada la fecha del 7 de junio, podrán recibir multas diarias de hasta 2.500 dólares. Los Ángeles es una de las 35 ciudades de California que optaron por crear una ley local que permitiera la venta de marihuana bajo receta médica.

Por lo visto con lo que habían contado, los legisladores de la ciudad de Los Angeles ,con su aparente tolerancia, es que de 4 dispensarios de marihuana medicinal que había en el año 2005 han pasado a ser unos 700 en el último año, con lo que las últimas medidas municipales se han convertido en un doble problema. Por un lado cientos de avispados negociantes que habían encontrado un filón comercial con la apertura de dispensarios cánnabicos, se encuentran con sus inversiones en peligro. Pero por otro, y lo que es más grave miles de enfermos necesitados de su marihuana tendran que asumir una importante perdida en su calidad de vida. Por eso soy de la opinión que no deberíamos mezclar churras con merinas, y defender hasta el final el consumo medicinal de la marihuana para el que sufre, pero no excusarnos en esto, los que por suerte, a día de hoy solo queremos fumarnos un porrito y ser un poco más felices.