viernes, 26 de febrero de 2010

Marihuana en la tercera edad

Parecen sorprendidos los "especialistas" tras hacerse públicos los resultados de las últimas encuestas del Substance Abuse and Mental Health Services Administration, (Administración de Servicios de Salud Mental y sobre el abuso de substancias) un organismo federal de los Estados Unidos. Y es que los resultados de dicha encuesta están empezando a dejar con el culo al aire al mito de que el consumo de marihuana es un problema y principalmente juvenil. Los siguientes datos comienzan a desmentir tan arriesgada teoría.


El porcentaje de personas mayores de 50 años que admite usar marihuana subió del 1,9% en el 2002 al 2,9% en el 2008. Este incremento se hace más notable entre las personas de 55 a 59 años: se triplicó, del 1,6% al 5,1%. en el mismo periodo. Varias razones parecen concurrir para justificar estos datos. Estos consumidores talluditos pertenecen pertenecemos a las generaciones nacidas entre 1945 y 1964 y que habían consumido, o visto consumir cánnabis.

Muchos la han seguido usando durante estos años. Otros estan aprovechando este renacer de la marihuana con fines medicinales para volverla a consumir por placer o para mitigar algunas dolencias asociadas a la edad. El cánnabis alivia muchos males asociados a estas edades: dolores,insomnio glaucoma, problemas con la vista y tantos otros. Es el caso de Perry Parks, de 67 años, piloto de combate retirado de Carolina del Norte, cuenta que sufría fuertes dolores causados por la artritis y problemas en la columna vertebral. Probó todo tipo de medicinas, sin éxito. Hace unos dos años ensayó con la marihuana y no pudo creer cuánto lo aliviaba. Ha reconocido que ya la había consumido en su juventud.

Otra de las consecuencias que se adivinan tras los porcentajes de la encuesta, es que de siempre han sido las personas mayores uno de los frentes más beligerantes contra el consumo de marihuana. Por mala información e ignorancia del tema siempre han tenido al cánnabis como una substancia peligrosa, marginal y asociada a la delincuencia. Salvada esta barrera generacional todo parece indicar que de aquí a algún futuro no muy lejano, puedan consumir libremente cánnabis, tanto los mayores como los jóvenes. En manos de todos está que este sueño se haga realidad.