lunes, 4 de enero de 2010

Osito de peluche con sorpresa

El propietario de la tienda Toy Town, del sur de California recibió hace unos días un paquete con un osito de peluche de 60 centímetros de altura. Extrañado de que sólo fuera uno y no un cargamento para la tienda examinó cuidadosamente al entrañable muñeco. Al apretarlo, o abrazarlo con mimo, quien sabe, el tipo notó que el relleno era “como duro y rizado”. Acto seguido, y en un acto de crueldad para con el peluche, que no tenía culpa de nada, abrió el juguete y encontró tres bolsas de marihuana rica, rica y envasada al vacío para que no perdiera ninguna de sus propiedades.



El tipo en cuestión avisó las autoridades, que ahora investigan la procedencia del osito, convertido a su pesar en correo del vicio y de la perversión, en prueba de la delincuencia. La primera y única víctima, que ya ha perdido la inocencia, que ya jamás acompañará a un niño o niña en sus juegos. ¡Cuidado con los camellos despistados!

Fuente: elnuevoparquet.com/redsocial